
Parroquia de Parajas, concejo de Allande.
En el Catastro del marqués de la Ensenada, de mediados del siglo XVIII, aparece una somera descripción de esta casa:
"Casa armera compuesta de varios dormitorios, sala, corredor y paxar alto, caballerizas y cocina terrena, cubierta de texa y cercada de muro, con sus arrimadixos, órreos y molino arinero, de un solo molar, que muele seis meses al año con agua de Fonte Grande".
Efectivamente se trata de una casa solar de los Llano, que tanta importancia ha tenido en la historia del suroccidente de Asturias, y enlazados con las principales familias de la comarca. No conocemos a los fundadores de la casa, aunque encontramos como uno de los primeros moradores a Nicolás de Llano, casado con María Alfonso, y que posiblemente ordenó colocar el escudo de armas en la fachada de la casa.
El arzobispo e inquisidor general D. Fernando Valdés Salas, nacido en Salas en 1483 y que falleció en Madrid en 1568, fundador de la Universidad de Oviedo y de los colegios de San Pelayo en Oviedo y Salamanca, obispo de Elna, en Cataluña; después de Orense y Oviedo. Presidente de la Real Chancillería de Valladolid, obispo de León y Sigüenza y Presidente del Consejo Real de Castilla y del Consejo de Estado, a donde pasó a ocupar el arzobispago de Sevilla. Una de las personas más destacadas e influyente de su tiempo, al redactar su generoso testamento en Torrelaguna, en 1553, deja a su pariente en tercer grado, Juan de Llano de Argancinas, vecino a la sazón de Cangas, la cantidad de cincuenta ducados, y a Gómez de Llano, hijo de Juan de Llano de Argancinas, también vecino de Cangas, otros quince ducados.
La casa de Llano de Argancinas, empieza a destacar como "hidalgos medianeros", preceptores de rentas, especialmente como "tomadores de foros" del monasterio de San Juan Bautista de Corias, en el siglo XVI, en los lugares de Vesullo, Fontes, Las Avelleras, Cueva del Puerto, la braña de Brañueta y la Franquera que subarrendaban a otros labradores. Estos foros de Corias, a su vencimiento, pasaron a la casa de sus parientes D. Juan de Argüelles de Allande, vecino de Cereceda, y su cuñada Doña María Flórez de la Sierra, para recaer definitivamente en los Llano Flórez, de la Casona de Besullo, hasta la época desamortizadora, del siglo XVX.
De ésta casa también salieron las ramas de Pedro de Llano Carrizo, de Villavaser, y la de los Llano de Linares, conocida actualmente como "la casa de Colás".
En el siglo XVI era señor de la casa, Alonso de Llano, que casó con Urraca Díaz, viuda de Juan Fuertes; y tuvieron por hijos a Juan, María, Catalina, Magdalena, Nicolás, Alonso, Teresa y Sancho.
Alonso de Llano, empadronado en el padrón de estado de 1698, como hidalgo notorio, casó con Doña Isabel de Sierra y Llano; hija de Diego Fernández de Llano y Doña Isabel de Sierra y Llano. Tuvieron por hijos, entre otros, a D. Nicolás de Llano que "casó en casa" y a D. Francisco de Llano y Sierra, que después de residir en Madrid, pasó a vivir a Linares, dónde casó en 1681 con Doña Manuela de Rojas Pambley, y era conocido por el mote de "capitán perra".
Don Francisco de Llano fue uno de los allandeses más destacados de su tiempo, como cabecilla de la guerra que sostuvieron los allandeses en 1690, con el Conde Marcel de Peñalba, que se decía Señor del concejo de Allande, en defensa de la libertad jurisdiccional, para lo cual el gobernador del Principado, tuvo que venir en persona a tratar de pacificar la tierra.
"El Capitán Perra", cuyo mote recibía, al parecer, por la figura de un lebrel que pintaba en su escudo de armas, y que levantó un verdadero ejército, tuvo que padecer en su propia persona las consecuencias de los parciales del conde que se oponían a los deseos de la mayor parte de los allandeses que aspiraban a depender directamente de la Corona.
Otro, Luis García, natural de Noceda, narra en Madrid así otro de los episodios de 1695:
". . . el día de Santo Juliano en dicho concejo, en el lugar de Santullano, a donde se hace la fiesta del Santo, hallándose el dicho Don Francisco de Llano y Sierra en la ermita a donde estava el santo, llegó el dicho Don Francisco de Zienfuegos y le assió juntamente con Pedro Fernández de la Puente y Pedro Fernández de Vega y Gabriel de Vitoria y Pedro Abad y Juan Ordás y otro que el testigo no se acuerda, que todos ivan en su compañía y le echaron al dicho Don Francisco de Llano en el suelo y le ataron las manos con una soga de zerda y le apretaron gravemente, de género que el susodicho dio voces a lo qual respondió el dicho Don Francisco de Zienfuegos y los que le acompañaban, que más le habían de apretar el pescuezo y que lo pusieron con dicha soga a la cola de su caballo que tenía el dicho Don Francisco de Zienfuegos y luego lo entregó a dos hombres para que tirasen de la soga y porque el dicho Don Francisco de Llano no se podía mover estando del género referido atado, sacó un puñal el dicho Don Francisco de Zienfuegos para metérselo por las espaldas y habiéndose hallado allí en aquella ocasión Gabriel de Vitoria, vecino del lugar de Villavaser, le detuvo el brazo diciendo se detuviese que eran todos perdidos y en esa conformidad le llevaron atado y le pusieron preso en la casa del dicho Conde, en la Torre de las armas y después de todo lo referido oyó decir el testigo que el dicho Don Francisco de Llano está con prisiones muy rigurosas, grillos, cadenas y esposas en las manos y que así que entró en la dicha prisión ataron la cadena en una vida poniéndole la cabeza hacia el suelo y los pies hacia la vida. . ." {A.H.N. Id, id.}.
Personaje importante, en esta familia, fue Don Carlos Alonso de Llano, nacido en 1714, que aparece en el Padrón de 1773 como "hidalgo medianero de armas pintar". Casó con Doña Isabel Flórez y tuvieron por hijos a Santiago (+1745), Nicolás (+1747), Joseph (+1752) e Isabel (+1749). A partir de esa época la casa empieza a ser conocida como Casa Carlos, de Argancinas.
No obstante perpetuaron el apellido Llano hasta el actual propietario Ceferino Francos Llano, hijo de Cesárea Llano Álvarez y de Antonio Francos Fernández (de Casa Carlos y Casa Roque, respectivamente), nacidos ambos en el propio pueblo de Argancinas. Casó Ceferino con María García Linares y tienen por único hijo y sucesor a Enrique Francos García, nacido en Oviedo en 1972, cuya pretensión es conservar y potenciar tan interesante legado arquitectónico e histórico para disfrute y deleite de las generaciones venideras.
- Autor: Antonio García Linares [Cronista Oficial del Concejo de Allande].
4 comentarios:
Una historia muy interesante, sin duda la Casa Carlos de Argancinas, es un sitio que merece la pena visitar, mas ahora con todas las mejoras que estás haciendo. Te está quedando muy bien el blog, espero que sigas con ello. Un saludo.
Interesante historia de la casa de Carlos de los Llano. Saludos.
http://www.atenciondental.com/index.html
Tuve el placer de conocer a los propietarios de La Casa Carlos de los Llano de Argancinas y el esfuerzo, cariño y compromiso con esta, refleja el valor de dicho legado.
Enrique Francos lo vas a hacer muy bien.
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